Una fuerte conmoción sacude al sector yerbatero tras conocerse que una de las cooperativas más importantes del país suspendió los pagos a sus productores “hasta nuevo aviso”, en medio de una profunda crisis financiera.
Se trata de la Cooperativa Andresito, elaboradora de la marca homónima, que ocupa el puesto número 11 en ventas a nivel nacional y es la cuarta cooperativa del rubro. A dos años de la desregulación del mercado yerbatero impulsada por el gobierno de Javier Milei, la noticia generó un fuerte impacto en las provincias de Misiones y Corrientes, principales productoras de yerba mate.
La decisión fue comunicada mediante una breve carta dirigida a sus socios, en la que las autoridades de la entidad señalaron que atraviesan “una situación financiera compleja”. “Lamentablemente no se podrán efectuar pagos hasta nuevo aviso”, indica el texto firmado por el presidente Juan Carlos Amann, el tesorero Víctor Hugo Krauzuk y el secretario Sergio Osvaldo Kreibiger.
La Cooperativa Andresito registró ventas por 5.534.000 kilos de yerba mate entre enero y octubre del año pasado, según datos del sector. Su crisis dejó al descubierto una problemática que venía siendo mencionada en voz baja entre los actores de la cadena yerbatera, pero que hasta ahora no había sido expuesta públicamente: pese a la baja en el precio de la materia prima tras la desregulación, muchas industrias enfrentan serias dificultades financieras.
Empresarios del rubro advierten que la falta de liquidez es generalizada y que la cadena de pagos se encuentra virtualmente cortada. En muchos casos, los productores cobran con cheques diferidos a plazos que llegan hasta los 120 días. “Esto no pasa solo en la yerba, sucede en toda la industria alimenticia”, había señalado semanas atrás el exgobernador de Misiones y empresario yerbatero Ramón Puerta.
Desde distintos sectores coinciden en que la crisis afecta a toda la cadena productiva. “Está en crisis todo el sector yerbatero, sobre todo productores y secaderos, pero la industria también atraviesa momentos muy complicados”, afirmó Juan José Szychowski, último presidente del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) antes de la desregulación.
El cambio en las reglas de juego alteró una dinámica que durante años se sostuvo con altos niveles de inflación, stockeo y remarcaciones de precios. Con la desregulación y una caída cercana al 10% en el consumo de yerba mate durante 2024, las empresas comenzaron a competir con precios más bajos para sostener su participación en el mercado, mientras enfrentaban fuertes aumentos de costos en salarios, energía y transporte.
Finalmente, referentes del sector advierten que el caso de la Cooperativa Andresito podría no ser el último. “No se sabe cuál va a ser la próxima en caer, pero todos saben que habrá otra empresa yerbatera en problemas”, coinciden exfuncionarios y empresarios. El episodio expuso una realidad inesperada: lejos de beneficiarse, gran parte de la industria yerbatera quedó atrapada en una crisis que pone en jaque su sostenibilidad.
Con información de agencia Infogremiales
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