En medio del paro y los reclamos, separaron a dos gemelas siamesas en el Hospital Garrahan
Mientras los trabajadores realizaban un paro por reclamos salariales, un equipo multidisciplinario logró separar con éxito a dos bebés unidas por el abdomen en una compleja intervención
En una jornada marcada por la protesta sindical, el Hospital Garrahan fue escenario de un hecho médico extraordinario: la exitosa separación de dos gemelas siamesas de tres meses de vida. La intervención quirúrgica, planificada durante meses, se desarrolló mientras los trabajadores del centro de salud realizaban un paro de 24 horas para reclamar mejoras salariales y la aprobación de la Ley de Emergencia Pediátrica.
La protesta en el Garrahan
La medida de fuerza fue convocada por la Asociación de Profesionales y Técnicos (APyT), la Junta Interna de ATE y otros sectores del hospital. Norma Lezana, secretaria general de APyT, advirtió que continuarán con las movilizaciones hasta lograr una recomposición salarial que frene las renuncias de personal. «Es casi un plebiscito de hecho, sobre lo elemental y justo de nuestro reclamo», afirmó la dirigente.
Los trabajadores realizaron una protesta frente a la obra social UP, denunciando «copagos abusivos», y anunciaron un nuevo paro para el martes 19. Lezana adelantó posibles movilizaciones a la Quinta de Olivos si el Senado no trata pronto la ley de emergencia.
Una cirugía de alta complejidad
Mientras se desarrollaba el conflicto laboral, un equipo de más de 20 profesionales liderados por el doctor Victor Ayarzábal realizaba la delicada intervención para separar a las gemelas, que pesaron 1.800 gramos cada una al nacer en Rosario. Las pequeñas estaban unidas por el abdomen y compartían parte del hígado y el esternón.
Mariano Boglione, jefe del quirófano, explicó que durante tres meses prepararon meticulosamente cada detalle del procedimiento. «Ensayanos y planificamos cada movimiento para asegurar el éxito», señaló, destacando que aunque era una cirugía riesgosa, «la probabilidad de supervivencia era alta».
La recuperación de las pequeñas
Tras la intervención, que permitió asignar a cada bebé su propio hígado funcional, las niñas fueron trasladadas a terapia intensiva neonatal. Allí ya fueron retiradas de la asistencia respiratoria mecánica y evolucionan favorablemente. Cuando logren alimentarse por sí solas, podrán regresar con sus padres a Rosario.
El caso contrasta con la situación del hospital, donde los trabajadores advierten sobre las consecuencias del recorte presupuestario en la atención pediátrica de alta complejidad. Mientras celebraban este logro médico, insistían en la urgencia de resolver la emergencia salarial que afecta al personal.
