Pesar en el tenis por la muerte de Juan Carlos Belmonte, el histórico preparador físico de Vilas
Juan Carlos Belfonte, el histórico preparador físico de Guillermo Vilas, el mejor tenista argentino de la historia, falleció este martes a los 81 años en el Hospital General de Agudos Bernardino Rivadavia, donde permanecía internado desde el sábado pasado tras haber ingresado con un cuadro de neumonía y en las últimas horas se confirmó que también había dado positivo en coronavirus.
«Querido ‘Profe’ gracias por tanto que me diste, toda la vida. QEPD», publicó Guillermo Vilas en su cuenta oficial en Twitter ni bien se enteró de la noticia del deceso, desde su actual residencia en Montecarlo.
“El Profe», como lo conocía toda la familia de nuestro deporte, tuvo una estrecha relación con la Asociación Argentina de Tenis y, en particular, con el equipo de Copa Davis, al que preparó físicamente a lo largo de dos décadas, entre 1970 y 1990, con un récord de series disputadas: 58.
También acompañó a Vilas, como encargado de la preparación física, en el “Programa Argentina 2008”, una iniciativa llevada a cabo en el CeNARD, con el objetivo de detectar y desarrollar futuros talentos, promovida por la Secretaría de Deportes en conjunto con la AAT.
Belfonte, nacido el 1 de abril de 1939, fue un maestro y ejemplo para varios colegas y jugadores que también lo vieron desempeñarse como Director Deportivo de varias instituciones, entre ellas el Buenos Aires Lawn Tennis Club y el Tenis Club Argentino.
Quienes trabajaron a su lado coinciden unánimemente en una característica: siempre lo hizo con la misma seriedad y compromiso; y con el firme propósito de desarrollar el tenis en todo el país, asistiendo e incluso alojando a juveniles que llegaban a la capital desde distintas provincias en busca de su sueño.
Humilde, profesional y generoso a la hora de reconocer el trabajo de los demás, el libro La historia del tenis en la Argentina, del periodista Eduardo Puppo, rescata una frase de Belfonte que refleja alguna de estas virtudes: “Hay que ser justos y reconocer la labor de los clubes para la expansión del tenis, a veces no recompensada por nadie. Mucha gente hizo grandes esfuerzos para que el tenis avanzara”.
El Presidente de la Asociación Argentina de Tenis, Agustín Calleri, lo despidió: “No puedo dejar de recordar mis épocas de juvenil, porque tuve la suerte de que el Profe se cruzara en mi camino en pleno ascenso. Me quedo no sólo con su profesionalismo, sino también con sus consejos y su gran sentido del humor. Hoy se fue un pedazo de historia del tenis argentino”.
“El Profe” falleció en el Hospital Rivadavia, donde se encontraba internado con un cuadro avanzado de leucemia y Covid-19.