Cristina Kirchner contra Georgieva y Axel Kicillof no se quiso quedar atrás
Axel Kicillof y Cristina Kirchner.
La expresidenta Cristina Kirchner y el gobernador Axel Kicillof criticaron duramente a la directora del FMI por su apoyo al gobierno de Milei, acusándola de injerencia en asuntos internos.
La expresidenta Cristina Kirchner y el gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, protagonizaron una dura ofensiva contra la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, luego de que la funcionaria elogiara el rumbo económico del gobierno de Javier Milei. Las críticas se materializaron en sendas cartas públicas que acusan al organismo internacional de parcialidad e injerencia en asuntos internos ante las elecciones legislativas de este año.
Kirchner, a través de una extensa publicación en redes sociales, responsabilizó al FMI por los ciclos de endeudamiento y ajuste en Argentina, mientras que Kicillof envió una carta formal al directorio del organismo exigiendo una investigación contra Georgieva por violar el principio de imparcialidad.
Los argumentos de Cristina Kirchner
En su texto, la ex mandataria trazó un crudo diagnóstico de la situación económica actual:
- Destrucción de más de 180.000 empleos privados
- Desindustrialización récord según la ONU
- Caída libre del consumo y la inversión privada
- Fuga de divisas por US$12.000 millones
«El ‘cambio’ que ustedes celebran nos arruinó», afirmó Kirchner, en referencia al gobierno de Mauricio Macri y su vínculo con el FMI. La líder peronista también ironizó sobre el reciente acuerdo por US$20.000 millones: «Justo el monto que se fugó en 10 meses».
La ex presidenta no omitió referirse al viaje de Milei al Vaticano, cuestionando su tardanza en la ceremonia por el fallecimiento del papa Francisco: «¿Llegaste tarde por un problema de agenda o por alguna otra razón que los argentinos desconocemos?».
La carta de Kicillof al FMI
El gobernador bonaerense centró su reclamo en una fotografía donde Georgieva aparece con el ministro Federico Sturzenegger, ambos luciendo pines con forma de motosierra, símbolo del gobierno libertario.
«¿Se imaginan las reacciones que causaría en el mundo si la titular del FMI se dejara fotografiar con un pin del Partido Justicialista?», cuestionó Kicillof en sus redes sociales. El mandatario consideró que esta actitud viola el reglamento del FMI, que exige neutralidad a sus funcionarios.
El ministro de Gobierno bonaerense, Carlos Bianco, fundamentó jurídicamente el reclamo citando el código de conducta del organismo: «De la directora gerente se espera que actúe con imparcialidad, asegurándose de que la expresión de sus opiniones y convicciones personales no comprometa ni parezca comprometer el desempeño de sus funciones oficiales».
El contexto de las críticas
Las reacciones se produjeron luego de que Georgieva, durante las reuniones de primavera del FMI, pidiera «no desviarse del carril del cambio» en referencia a las políticas económicas argentinas. Esta declaración fue interpretada por la oposición como un respaldo explícito al gobierno de Milei de cara a las elecciones legislativas.
Kirchner recordó en su carta que durante su gestión Argentina canceló la deuda con el FMI «por dignidad y soberanía», adjuntando un artículo de 2006 que documentaba cómo el organismo tuvo que ajustar su presupuesto tras ese pago.
Por su parte, Kicillof exigió al directorio del FMI:
- Una investigación formal contra Georgieva
- Una rectificación pública
- Evaluar su posible remoción del cargo