Javier Milei: Tan «despierto» y tan «dormido»
Javier Milei con Jony Viale
El Presidente de la Nación, Javier Milei, no entiende bien la posición que ocupa. El se cree un «argentino más» (que puede ser en su concepción) pero todo lo que dice, hace, opina o tuitea, tiene una repercusión inusitada y por éste motivo se cae en algunos errores increíbles y se «come» como él mismo dice, un «cachetazo» de gente que se aprovechó de su cercanía…
Lo que pasa también, que repercute en su credibilidad y en éste momento en que todo el «mundo» (literal) está observando sus movimientos o escuchando sus opiniones, tendría que bajar una marcha y pensar mejor «qué decir» y a «quien apoyar»…
Este tema de la criptomoneda recorrió el mundo, con gente que lo «mata» (por su actitud de apoyar un emprendimiento que duró solo unas horas y dejó a varios «golpeados») y que lo «apoya» por igual, por su «ingenuidad» si es efectivamente como él dice, «que no sabía que iba a pasar eso» y que tuviera que quedar «pegado» en esta situación…
Es tan «despierto» en la faz económica y tan «dormido» en las relaciones humanas.
Y aquí también mencionamos a su hermana Karina, que el «contacto» argentino de ésta criptomoneda estuvo reunido con ella en distintos ámbitos y era cercano al Presidente.
«Obré de buena fé» habría dicho Milei en las últimas horas y estará en uno creerle o no.
Dada la situación del país en que recién está saliendo lentamente de su paupérrimo presente económico (que dejó el último gobierno de Alberto Fernández y Cristina Kirchner, no olvidamos eso) Milei no se puede dar el lujo de caer en estos errores, por su imagen, por lo que quiere lograr, por la gente que lo apoya y sobretodo, por la suerte de Argentina para los próximos años…
No olvidemos que este año es electoral (de medio término, se renovará la mitad de las cámaras de Diputados y Senadores nacionales) y es un momento «bisagra» del país, seguir hacia adelante o nuevamente volver para atrás…
Por lo pronto a Milei le diría: «dejá de tuitear boludeces, maestro! si?»
Para pensar. ¡Hasta la próxima!
Por: Pablo Rennella (Analista Político)